Robar es malo, en esta afirmación la mayoría estaremos de acuerdo, sin embargo, es innegable que algunos robos han destacado a lo largo de la historia, debido a su cuidadosa organización, que pareciera ser la escena de una película. Algunos de estos son los siguientes.
Robo al tren de Glasgow
Este famoso robo fue llevado a cabo el 8 de agosto de 1963, cuando el tren correo iba camino de Glasgow a Londres, con una gran carga de dinero.
Este tren fue asaltado por una banda conformada por 15 hombres, todos dirigidos por Bruce Reynolds, quienes robaron la cantidad de 2,6 millones de libras, alrededor de 3 millones de euros, pero con todas las variaciones de la economía del país, esta cantidad equivaldría a uno 46 millones de euros.
Fue un asalto sin armas de fuego. Trece de los 15 asaltantes, fueron capturados al identificar las huellas dactilares que dejaron en un juego de mesa. Reynolds, por su parte, se escapó de la justicia durante 5 años, fue capturado en el año 1968 en Inglaterra y cumplió condena hasta el año 1978.
Centro de Diamantes – Amberes
El robo a este centro, ha sido uno de los más meticulosos que se ha conocido, ocurrió en el año 2002, cuando una banda de delincuentes de origen italiano, lograron burlar el trabajo de los profesionales, que seguramente incluyó más de un cerrajero, y quienes se encargaron de formar la rigurosa seguridad de este lugar.
De este evento destacan varios aspectos, en primer lugar, que lograron superar 10 niveles de alta seguridad, y lograron robar los diamantes, sin dejar huella alguna y sin usar la violencia. Aparte, este botín calculado en 18 millones de euros, aún no se ha encontrado, sin embargo, lograron capturar a Leonardo Notarbartolo, quien fue el jefe de la banda, y lo condenaron a 10 años de prisión.
Robo al Museo Isabella Stewart Gardner – Boston
El robo al Museo Isabella Stewart Gardner de Boston, ha sido considerado uno de los mejores robos de la historia, ocurrió el 18 de marzo del año 1990, y el botín fue calculado, nada menos que por 500 millones de dólares, y estaba conformado por 13 obras de arte de Rembrandt, Vermeer y Degas.
Lo más impresionante de este robo, fue lo sencillo de su ejecución. Lo que sabemos de este hecho, es que dos ladrones se disfrazaron de policía, y accedieron al Museo, luego de que había cerrado sus puertas, y para entrar, indicaron que recibieron una llamada de emergencia y por eso se apersonaron al lugar.
Una vez dentro, inmovilizaron a los guardias de seguridad, los esposaron en el sótano y tenían sus bocas vendadas con cinta adhesiva, lo que les dio la oportunidad de recorrer todas las instalaciones del lugar y poder coger las obras de arte que conformarían su botín.
Vale destacar, que se enteraron del suceso, cuando correspondía la hora de cambio de guardia, varias horas después.
Hubo muchos fallos en el análisis del caso, pues no tomaron muestras de ADN, no recuperaron huellas dactilares de las cintas y los casetes que contenían el video de lo ocurrido durante la hora del robo, no estaban. Este es otro robo, que aún no ha sido resuelto.
